A pesar de la adopción del paradigma de la movilidad sostenible por las agendas políticas a nivel mundial (Banister, 2008), las metrópolis latinoamericanas aún presencian retos importantes en términos de transporte urbano. Su alta segregación obliga a los hogares más pobres a asentarse en periferias alejadas de los centros de empleo (Dureau et al., 2015; Tiznado-Aitken et al., 2023). Este fenómeno de spatial mismatch (Gobillon et al., 2007) está asociado con viajes pendulares muy largos por gran parte de la población de bajos ingresos (Thomas & Demoraes, 2023). Asimismo, el crecimiento acelerado del uso del automóvil particular y la motocicleta (CAF, 2010) así como el desinterés por el transporte público (Bocarejo & Urrego, 2020) incrementan la congestión, la siniestralidad vial, los tiempos de viaje, la contaminación aérea y las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Si bien la distancia de los viajes es un indicador clave, junto con la elección modal, para entender la diversidad de prácticas de la movilidad urbana, pocas veces se calcula directamente por la complejidad de esta estimación. Combinados con variables socioeconómicas, los indicadores basados en la distancia de viaje permiten evidenciar las desigualdades de movilidad (Demoraes et al., 2021; Jirón Martínez, 2009) así como las desigualdades ecológicas asociadas (Emelianoff, 2008). En esta ponencia, proponemos analizar con un enfoque comparativo la huella ambiental que generan los viajes diarios en Bogotá (Colombia) y Lima (Perú). De manera más específica, presentamos un marco metodológico unificado para evaluar la demanda de movilidad urbana utilizando microdatos procedentes de encuestas de movilidad de hogares. Los indicadores derivados del cálculo de la distancia de los viajes basados en la red vial, como los pasajeros-kilómetros recorridos (PKT), se utilizan junto con el reparto modal para proporcionar un enfoque original de los patrones de movilidad urbana en contextos latinoamericanos. Evidenciamos patrones de viaje diferenciados y desigualdades de movilidad relacionadas principalmente con la propiedad y el uso del automóvil privado, así como la oferta de transporte público. Pusimos un énfasis en la estimación de las emisiones de GEI producidas por los viajes diarios y directamente relacionadas con las características de los mismos, lo cual requiere como paso previo estimar distancias. Resolvimos varias limitaciones de estudios anteriores para estimar las distancias basadas en la red, así como las emisiones de GEI. En un enfoque de ciencia abierta, todos los procesamientos fueron realizados en R y los scripts asociados están disponibles en nuestro repositorio . Esta mirada a las distancias individuales permite entender cómo los diferentes modos de transporte atienden necesidades diversas y son utilizados por poblaciones distintas, lo cual es un reto para el desarrollo de políticas públicas de la movilidad sostenible enfocadas a acortar distancias o inducir cambio modal entre la población.